Embotamiento afectivo: la desconexión con tu parte emocional
En ocasiones, las personas pueden experimentar una sensación de apatía y falta de conexión emocional, lo que se conoce como embotamiento afectivo. Este fenómeno se caracteriza por una disminución o ausencia de respuestas emocionales ante situaciones que normalmente provocarían emociones.
En este blog, exploraremos que es este síntoma de inexpresividad emocional, que lo causa, causas y posibles tratamientos.
Qué es el embotamiento afectivo
El embotamiento afectivo, también conocido como anhedonia emocional, es un estado en el que la capacidad de experimentar emociones se ve reducida o bloqueada. Las personas que lo experimentan pueden sentirse desconectadas de sus propios sentimientos y de los demás, lo que puede generar una sensación de vacío emocional. Esto puede afectar negativamente la calidad de vida y las relaciones personales.
Síntomas del embotamiento afectivo
Algunos de los síntomas comunes del embotamiento afectivo incluyen una disminución en la capacidad de experimentar alegría, placer o entusiasmo. Las personas pueden sentirse emocionalmente adormecidas, con una incapacidad para experimentar emociones positivas o negativas de manera intensa. Además, pueden presentar dificultades para expresar emociones o incluso para reconocerlas en sí mismas o en los demás.
- Inexistencia del placer emocional: cuando una persona sufre este tipo de inexpresividad emocional puede presentar dificultades para tener emociones positivas como son la alegría o satisfacción. Incluso algunas cosas que antes le hacían muy feliz como tener una cita con su pareja, ahora pueden parecerles momentos vacíos o sin valor.
- Ausencia de respuesta emocional: ante situaciones que necesitan una respuesta de carácter afectivo, la persona que sufre embotamiento afectivo sufre un bloqueo y se ve incapaz de expresarlo ya que se encuentra desconectada emocionalmente de su entorno.
- Tampoco emociones negativas: la inexpresividad emocional no es necesariamente que no se disfrute de la parte emocional de la vida sino que, tampoco se experimenta aquellas partes más duras que te limita vivir la vida en su esencia pura, como es con tristeza, ansiedad, ira, asco.
- Mala expresión de emociones: al no estar conectado con su parte emocional, las personas que sufren embotamiento afectivo no logran encontrar la expresión a sus sentimientos o parte afectiva.
Cabe destacar que, estos son algunos de los síntomas más comunes pero que tanto la intensidad de estos como la duración es totalmente dependiente a cada persona, así como otros síntomas complementarios que se pueden presentar. Por ello, lo mejor es acudir a un psicólogo o psiquiatra para tener tu diagnóstico definitivo.
Causas del embotamiento afectivo
Las causas por las que se puede presentar un embotamiento afectivo son muy amplias, asó como pueden tener una relación estrecha con factores como la genética, el entorno o la mente de la propia persona.
Algunas de las causas comunes por las que se comienza a sufrir embotamiento afectivo son; atravesar una depresión (ya que se puede tratar de un propio síntoma), acomulación de estrés o estrés prolongado, situaciones traumáticas o incluso el uso de ciertos medicamentos que pueden tener como efecto secundario el inexpresividad emocional.
Tratamiento del embotamiento afectivo
Como hemos mencionado anteriormente, tanto para el diagnóstico como para el tratamiento, al igual que la mayoría de trastornos psicológicos, lo mejor es acudir a un psicólogo profesional que pueda ayudar de forma segura y con conocimientos.
El tratamiento del embotamiento afectivo comenzará por descubrir si existe alguna causa latente por la que se esté experimentando, para así lograr disminuirla o eliminarla. Además, se trabajarán técnicas de relajación, conexión con uno mismo y apoyo social. Por último, es muy importante mantener un estado de vida saludable para controlar el inexpresividad emocional.
Cabe destacar que, tanto la duración como técnicas o intensidad del tratamiento dependerá de la situación y evolución de cada persona.
Si crees que sufres embotamiento afectivo no dudes en buscar ayuda, a pesar de que parece que es un duro camino, te aseguramos que con ayuda puedes encontrar la salida y volver a disfrutar de la vida con todas sus emociones, positivas y negativas.
Mi nombre es Javier Álvarez, soy psicólogo general sanitario, colegiado por el colegio oficial de psicólogos de Andalucía con el número AO10698.
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